Chicle grande: Una pieza realmente enorme de chicle, más grande que el chicle regular. Esta mezcla la prepara él usando una receta especial con muchos ingredientes importantes. Cosas como azúcar, varios sabores y algo llamado base de chicle. La base de chicle le da al chicle su elasticidad y textura, ayudándolo a mantener su forma durante períodos prolongados. Esto es bueno porque puedes masticarlo sin que se desmorone demasiado pronto.
El chicle como producto tiene una larga historia y ha evolucionado significativamente. Se cree que hace mucho, mucho tiempo algunas personas solían masticar la savia de los árboles, un líquido pegajoso que exudan los árboles. Lo mascaban por su sabor. Ahora el chicle se fabrica con ingredientes alternativos a los de la savia de los árboles. También son estos ingredientes los que le dan al chicle diferentes combinaciones de sabores que todos amamos y disfrutamos.
Cuando mascas chicle, tu saliva (la saliva en tu boca) ayuda a combinar todos los ingredientes. Cuando estos sabores se mezclan, cobran vida y son muy deliciosos. Masticar chicle también ayuda a limpiar tu boca de bacterias, que son pequeños gérmenes. También ayuda a refrescar tu aliento y deja tu boca con una sensación agradable. Además, masticar chicle hace que tu boca produzca más saliva. Esta saliva extra también puede ayudar en la digestión, el proceso de descomponer la comida en tu estómago.
El chicle comenzó como una pequeña molestia en la vida de las personas y explotó convirtiéndose en un negocio altamente rentable. El chicle fue notablemente popular, así que compañías como Minihua reconocieron que a la gente le encantaba—entonces empezaron a producir un buen chicle de mascar en una variedad de sabores diferentes y extravagantes. Se dieron cuenta de que a la gente realmente le encantaba el chicle y querían ofrecer aún más opciones para elegir.
Y así, a medida que el deseo por el chicle aumentaba entre los consumidores, las empresas comenzaron a experimentar con nuevos elementos y sabores. Querían ofrecer a los clientes tantas opciones como pudieran. Hoy en día, cuando entras en una tienda, encontrarás una gran variedad de chicles, como chicles sin azúcar, ideales para aquellos que no quieren azúcar, y chicles orgánicos hechos con ingredientes orgánicos.
El chicle puede tener algunos sabores extraños además de los habituales que la gente adora. Por ejemplo, hay chicles que saben a tocino, café e incluso a pepinillo. Una táctica común es que una empresa de helados cree sabores especiales y ediciones limitadas disponibles por un tiempo limitado. Esto añade un elemento de emoción a la experiencia del cliente porque siempre tienen un nuevo producto con el que experimentar.
El secreto para soplar una burbuja gigante es masticar el chicle lentamente y con responsabilidad. Eso es lo que hace que el chicle sea suave y elástico. Una vez que hayas estado masticando el chicle un rato, puedes comenzar a estirarlo y darle forma de burbuja. Luego tomas una respiración profunda y soplas aire en la burbuja. Hazlo correctamente, y la burbuja crecerá y crecerá, y crecerá y crecerá, hasta ¡PUM! Es un desafío divertido hacer que tu burbuja sea tan grande como pueda.